Si, ya sabemos, amigos
aventureros, que viajar mola un montón y cuanto mas lejos y exótico sea nuestro
destino, mejor, y si encima se trata de un lugar al que va muy poca gente, o en
el colmo de la alegría aún no ha ido nadie, el hecho de viajar se convierte en el mayor y más completo
de los placeres. Vale, pero todo tiene un limite, digo yo; limite que ignoran las
casi trescientas mil personas que se apuntaron hace un par de años a un viaje
sin retorno a Marte. Esta cifra corresponde solo a los dos primeros meses, por
lo que es de suponer que el numero de pirados (pretendidamente) haya aumentado
considerablemente, pero vamos, que me da igual, el hecho de que haya más de un
par de docenas, ya me resulta chocante.
De esa cifra de voluntarios,
3.722 son españoles, lo que indica claramente hasta qué punto están hartos de
Rajoy. Solo por eso, la verdad es que yo también me lo plantearía, pero cuando
me entero de que en Marte la temperatura puede alcanzar los -140º centígrados,
hay algo dentro de mi que se encoge hasta el dolor impidiendo cualquier
consideración en contra de quedarme donde estoy. Como mucho, Alemania, y eso
que ahí también cuando hace frío, hace frío.
Todo esto corresponde al
proyecto holandés Mars One, que pretender crear una colonia con unas 25
personas en el planeta vecino, que decimos vecino y parece que está al lado de
casa, pero se encuentra a 59 millones de kilómetros cuando lo tenemos más
cerca. Porque esa es otra, la distancia varía si está en conjunción con la
Tierra a si está en oposición, y a su vez es distinta si se encuentra en su
afelio o en su perihelio, vamos que si eliges mal el momento de salir, te
puedes encontrar con que Marte está a más de 400 millones de kilómetros. Es
como decir, me voy a Galapagar a comerme unas chuletas y resulta que te lo han
puesto a mil kilómetros de tu casa, que vives en Colmenar Viejo. Una gracia.
La cosa es noticia estos
días, porque entre todos los afortunados que han sido preseleccionados para tan
ilusionante viaje, se encuentra un español, Juan José Díaz. Enhorabuena al
premiado. Según ha dicho se encuentra muy contento y espera pasar a la
siguiente fase que aún desconoce en qué consistirá. Vete a saber, pero seguro
que los acaban metiendo en una máquina que da vueltas a gran velocidad, con lo
que eso marea.
Si supera esta fase y las siguientes, pues la cosa no ha hecho nada más que
empezar, formará parte del primer asentamiento humano en Marte, con la misión
de entretener a todos los hogares terráqueos, pues para conseguir financiación
pretenden vender los derechos de transmisión de imágenes. Una especie de Gran
hermano, sí, vaya bajonazo, pero ya sabemos que lo que más pasta da es el
reality show. Empezará a emitirse en la etapa de selección final y con toda
seguridad se convertirá en el mayor suceso mediático a escala global de todos
los tiempos.
En cualquier caso, Mars One
deja claro que viajar no solo es conocer sitios nuevos sino huir de los que ya
conocemos.
Eso que comentas coincide con algo que dijo Unamuno (en "Niebla", por cierto): "La manía de viajar viene de la topofobia y no de la filotopia, el que viaja mucho va huyendo de cada lugar que deja y no buscando cada lugar a que llega".
ResponderEliminarAunque personalmente creo que muchas veces viajamos para huir de nosotros mismos, sin darnos cuenta de que formamos parte del equipaje.
hagamos lo que hagamos, somos parte de lo que hacemos. Prisioneros de nuestra propia mismidad, y cuando nos liberamos, significa la locura.
EliminarHacía tiempo que no tenía noticias sobre la misión Mars One, hasta el punto de pensar que la habían descartado por imposible. Pero veo que no, que ahí continúa con su propósito intacto.
ResponderEliminarTengo la impresión de que todo quedará en una broma, en una pantomima que simule un despegue, un viaje espacial (habrá que ver cómo se las ingenian para fingir gravedad cero) y un escenario que aparente estar en Marte, para lograr emitir un programa de entretenimiento mundial. Y, oye, que tampoco me parecería mal. Pero si logran sorprenderme y son capaces de hacerlo realidad, sería para darles todos los premios del mundo mundial y parte del extranjero.
comparto esa impresión, sobre todo, tal como lo explican da la sensación de que van a enviar a los elegidos a un refugio o algo así, pero antes habrá que construirlo, ¿y quién lo construye? ¿otros humanos previamente enviados y que tampoco volverán?¿robots? ¿mi abuela? no sé, no sé...
Eliminar